Muy pocos conocen los hábitos reproductivos del calamar. No es algo que veamos cotidianamente en vivo o en la televisión, por lo que podría decirse que es un tema un tanto ignorado.
Los cefalópodos tienen una reproducción sexual. El dimorfismo entre géneros es muy difícil de distinguir a simple vista, pero en especies como el calamar vampiro puede apreciarse la diferencia de tamaños donde la hembra precede al macho. Dependiendo de la especie, se reproducen generalmente en primavera y verano, pero los que habitan en regiones tropicales pueden hacerlo en cualquier parte del año.
Los rituales de cortejo consisten algunas veces en cambios de color, movimientos con el cuerpo o la combinación de ambas cosas. Congregaciones de varios téutidos se mantienen en el fondo marino poco antes de la fertilización. Primero nadan de un lado a otro y se observan acercamientos corporales sin una culminación reproductiva, pero pocos minutos después, el macho procede a cumplir su objetivo.
Los rituales de cortejo consisten algunas veces en cambios de color, movimientos con el cuerpo o la combinación de ambas cosas.
Uno de los brazos del macho de algunas especies es de gran utilidad durante la temporada reproductiva, ya que ayuda a transferir el esperma a su pareja sexual. Este brazo es denominado hectocótilo. Durante la cópula, el macho retira espermatóforos del saco de Needham para trasladarlos a la cavidad del manto de su compañera. En otras especies los espermatóforos son expulsados del pene.
El testículo es de color blanco y se sitúa del lado izquierdo del manto. Ahí se producen los espermas que pasarán a través de los conductos deferentes y de ahí a la vesícula seminal. En la vesícula, el esperma se encierra en un espermatóforo. Una vez que se completa la cantidad de espermatóforos, pasan al saco de Needham, el cual puede almacenar más de 400 cápsulas.
Cuando los huevos se liberan en el agua, la capa que los recubre se endurece y las cápsulas se hinchan. Su desarrollo depende en gran medida de factores ambientales como la luz y sobre todo la temperatura.
El calamar australiano austral (Sepioteuthis australis) pone sus cápsulas de huevos sobre esponjas marinas, hierbas marinas o en el fondo del mar en aguas someras litorales. Una sola cápsula contiene de tres a diez huevos fecundados, pero son varias las hembras que pueden colocarlos en el mismo racimo, por lo que llegan a congregarse hasta 2,000 cápsulas de huevos.
La mayoría de los cefalópodos son semélparos, es decir, se reproducen una sola vez en toda su vida.
En general, la gran mayoría de los cefalópodos son semélparos, es decir, se reproducen una sola vez en toda su vida y posteriormente mueren. Esto significa que no tienen una responsabilidad paternal con sus crías ni conviven con ellas.
Calamares pertenecientes a algunos géneros tienen una expectativa de vida muy corta pero crecen muy rápidamente; por ejemplo, el calamar gigante no vive más de cinco años, lo que indica que su crecimiento es muy acelerado, a diferencia de otros animales colosales como las ballenas que alcanzan sus medidas máximas varios años después del nacimiento y logran vivir un tiempo más prolongado.
Loligo forbesii vive un máximo de tres años, Watasenia scintillans vive alrededor de un año y ciertos calamares del género Idiosepius, tienen una vida útil de tan solo 150 días.